El primer paso en la rinoplastia es la anestesia. Dependiendo de las recomendaciones del médico, la rinoplastia se realiza en el llamado Sueño superficial, combinado con anestesia local o bajo anestesia completa. Luego se hace una incisión en la nariz: abierta o cerrada. La piel cortada se separa del cuerpo, gracias a lo cual el cirujano (por ejemplo, en rinoplastia en valencia, uno de los mejores lugares de toda España para realizarla) obtiene acceso al hueso y al cartílago. Luego realiza una reducción (por ejemplo, de una joroba de la nariz) o una reconstrucción de la estructura de la nariz utilizando cartílago de otras partes del cuerpo. En el caso de un tabique distorsionado, enderécelo para facilitar la respiración.
Una vez corregida la forma de la nariz, se suturan todas las incisiones quirúrgicas, y si la operación consistió en la reducción de las alas de la nariz, se unen los bordes de las heridas con una sutura cosmética después de su corte.
Se insertan tampones especiales en la nariz para absorber el exceso de sangre y la propia nariz se cubre con una venda de yeso.
¿Cuándo hacer la revisión?
La decisión de realizar una rinoplastia debe tomarse de forma consciente y basada en sus propios sentimientos. La corrección puede ser realizada por personas:
- Cuyo tamaño de la nariz es desproporcionado al resto de la cara.
- Que tienen un puente de la nariz muy ancho
- Que tienen una joroba o un perfil de nariz hundido, y cuando la punta de la nariz está demasiado hacia arriba, caída o bulbosa.
- Que tienen grandes o alas anchas de la nariz.
- Con asimetría o curvatura lateral de la nariz y con un tabique nasal curvado.
- Con defectos nasales congénitos o traumáticos.